PALEODIETA PARA DEPORTISTAS





Según algunos autores la mejor dieta para un deportista es sin duda la paleodieta, ya que son las pautas de nutrición que seguían nuestros antepasados prehistóricos, que eran mucho más activos que nosotros.

Hoy, el homgre medio del mundo industrializado pasa el 70 por ciento de su tiempo sentado. Hace unos 10 mil años, nuestros antepasados cazadores recolectores tenían exactamente el porcentaje opuesto, ya que pasaban la mayor parte de su tiempo activos.

Para eso hemos evolucionado desde hace 2 millones de años, época en que apareció el género humano. Y nuestra especie Homo sapiens, que apareció en África hace apenas unos 200 mil años, se ha adaptado especialmente para correr. Somos maratonistas expertos por naturaleza, a pesar de que hoy en día la mayoría no podamos correr ni hasta la esquina, nuestro cuerpo casi no ha cambiado desde en los últimos 10 mil años.

Un atleta tiene una demanda extraordinaria de energía, y la alimentación de hoy en día falla en ese aspecto. Comemos muy mal, y eso nos enferma. Eligiendo los alimentos claves, podemos conseguir mucha mayor energía para nuestras células, sin necesidad ni de enfermarnos, ni de engordar.

El género humano viene comiendo verduras, frutas y carnes desde hace cientos de miles de años, y estamos totalmente adaptados a este tipo de alimentos. Son los mejores capacitados para cumplir con nuestras demandas nutricionales, por lo que comer estos alimentos nos hará bien, mientras que si los evitamos, nuestra salud se verá comprometida.

Si bien nuestros antepasados de hace unos 10 mil años podrían darle unas cuantas lecciones a los últimos ganadores de la medalla de oro de maratón de las Olimpíadas, para los atletas actuales hay que torcer un poco las reglas de por sí bastante laxas de la paleo dieta.

Realizar atletismo o algún deporte nos insume un gran gasto energético, y como suele durar tal vez horas esa demanda, hay que reponer la energía rápido. Por ello, se puede tolerar un poco más el consumo de algunos alimentos que no son tan óptimos para nuestra adaptación evolutiva.

Todo atleta debe comer antes de realizar ejercicio. Según la paleodieta, lo más recomendable es comer unas dos horas antes de una carrera o de algún ejercicio fuerte que sepamos que vamos a realizar. Lo mejor es comer con poca fibra en esta etapa, no más de unas 200 a 300 calorías, que puede incluir proteínas y grasas insaturadas. Es decir, según la guía de la paleodieta, alguna fruta, no mucho, pollo o tal vez algún huevo, para las proteínas, y carne para las grasas. Si no pueden comer dos horas antes, entonces lo más recomendable es que al menos unos 10 minutos antes se coma unas 200 calorías.

Durante el ejercicio es bueno también comer algo, si va a ser duradero. Para esto es bueno ingerir carbohidratos en forma de fluídos. Esto puede lograrse con esas bebidas especiales que se consiguen para los deportistas. Busca una que te guste, y toma mucho. Si el ejercicio no dura más de una hora, no hace falta que se ingieran los carbohidratos, con tomar mucha agua alcanzará. Pero si el ejercicio durará varias horas, se recomienda unas 200 calorías por hora, como mínimo, dependiendo del tamaño del cuerpo y de la duración del evento, se puede llegar hasta 400.

Comer inmediatamente después del ejercicio también es recomendable. Durante los 30 minutos posteriores a un ejercicio prolongado y/o intenso, lo más recomendable son las bebidas especiales que aportan tanto carbohidratos como proteínas, o sino un licuado natural de banana. En este tipo de ejercicio intento, es clave esta ingesta de los 30 minutos posteriores para recuperar la energía consumida.

En las siguientes horas posteriores al ejercicio, la misma cantidad que haya durado el ejercicio, hay que seguir enfocándose en los carbohidratos y las proteínas. Según la paleodieta, comer pastas, pan, cereales o granos, no es recomendable, porque la evolución no nos ha preparado para ese tipo de alimentos, pero en este caso, un ejercicio especialmente prolongado e intenso, sí se puede hacer una excepción.

También es recomendable el arroz y el maiz. Más cercanos a la paleodieta son las patatas o batatas.

El resto del día, lo mejor para recuperar las energías consumidas en hacer atletismo o deportes, es volver a la paleodieta más normal. Es decir, comer de forma adaptativa y variable.